EN MUCHAS OCASIONES NO CONOCEMOS SITIOS PARA IR A QUE NOS DÉ EL AIRE Y DE PASO TOMAR UNAS TAPAS. PARA ESTE TIPO DE PLANES, MUTXAMEL NOS OFRECE UNA VARIEDAD DE POSIBILIDADES A VECES SORPRENDENTE, COMO EL BAR ESCORPIÓN.
Buscando sitios en los que tapear y de los que, de paso podamos hablar en nuestro Blog, nos acercamos en el día de hoy al Bar Escorpión. Éste es un bar restaurante al que hace unos años nos llevaron unos amigos diciendo que allí estaban las mejores patatas bravas de Mutxamel. En aquel momento no teníamos el afán de intervenir en las costumbres culinarias de nuestra sociedad que tenemos hoy y no recordamos exactamente qué más tomamos. Pero el sitio, desde luego, nos gustó.
Nos acercamos y vemos que en la vitrina todo tiene muy buena pinta. Hay ensaladilla rusa, albóndigas, boquerones, calamares en salsa y sangre encebollada. Todo casero y con muy buena pinta. El local, más sabor no puede tener.En medio de la Partida Senyal, número 58 D, se trata de una casona vieja, no vamos a decir antigua, aunque perfectamente reformada por dentro, muy cómoda y limpia.
Pedimos un tinto de verano, un rioja y dos tapas, porque nos dicen al pedir la primera, si la queremos para uno o para dos. Enorme sorpresa la nuestra al ofrecernos la tapa individual en un sitio con tanto sabor. Si no nos sentimos en Granada porque no nos han puesto la tapa de la casa, al pedir la cerveza, sí podríamos estar en cualquier sitio de Sevilla.
Pedimos una tapa de calamares y una de sangre. Repetimos de bebida al terminarlas y decidimos probar para compartir el hígado. El precio, 12 € todo. Calculamos que a 2 € la tapa y a 1,5 € la bebida. En su precio, pensamos. Menos nos habría sorprendido por barato, y si hubiese llegado a 15 € nos habría parecido caro. Repetiremos, pensamos.
